Proveniente de una familia estrechamente ligada al Turf, la
joven jocketa abandonó el Ciclo Básico de veterinaria para dedicarse de lleno a
su gran pasión y hoy se destaca en un deporte con mayoría masculina.
Pocas chicas se
animan al turf
Es una profesión medio complicada, la
mayoría son hombres, las chicas somos contadas con los dedos. Por ahí no hay
muchas chicas porque es una profesión riesgosa. No es tan fácil pero la pasión es
más fuerte.
¿Cómo es un día de tu
vida?
Mi vida está casi toda relacionada con el
tema: a la mañana trabajar con los caballos montando en la cancha y a la tarde
en el hipódromo y cuando te quisiste acordar ya se te pasó todo el día
estuviste todo el tiempo arriba de un caballo o en el hipódromo, porque hay
carreras de lunes a lunes. Así que hay poco tiempo para descansar.
¿Cómo está conformada
tu familia?
Papá, mamá y somos nueve hermanos: siete
mujeres y dos varones.
Papá es entrenador y veterinario. Tengo a mi hermano mayor, que vive en Miami y
es veterinario y mi otro hermano varón que es entrenador.
¿Cómo llegó el Turf a
tu vida?
Es lo que nos dio de comer toda la vida. Papá
trabajaba de eso desde siempre y de muy chica lo acompañé. Y me fue llevando de
a poco a estar con los caballos.
Podrías haber
arrancado por el camino de la veterinaria…
En realidad, en principio la idea era
estudiar veterinaria. De hecho lo ayudaba a él cuando operaba o con los
tratamientos que había que hacer en el stud, que muchas veces los hacía yo. Terminé
quinto año y empecé el ciclo básico de veterinaria, peor al mismo tiempo había
salido de la escuela de jockeys y estaba corriendo. Y la verdad que para
estudiar veterinaria necesitas mucho tiempo. Así que: o hacía las dos cosas por
la mitad o hacía una en serio. Y bueno, me incliné a correr, que es lo que me
gusta más.
Tu papá debe tener
todavía ese miedo escénico cuando salía a correr
Bueno, al principio era un poco más fuerte,
pero ahora ya hace más de 13 años que corro. Igualmente no se pierden una sola
carrera mía y siempre están pendientes si corro o no corro. Mas que nada es
mamá la que no quiere ir al hipódromo porque tiene miedo.
¿Si no hubieses sido
jocketa?
Creo que algo con los caballo seguramente.
Pero si volviera a nacer sería jocketa de nuevo.
Sentís una pasión muy
intensa por el turf…
Yo creo que es general de toda la gente
que está relacionada con los caballos y el Turf creo que sienten la misma
pasión. Es así y es algo inexplicable.
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| Lucrecia visitando a chicos internados en en Hospital materno infantil "Carlos Gianantonio" de San Isidro. |
Me da la sensación
que ni siquiera lo relacionas con el tema juego, para vos pasa mas por una
unión con el animal que es mucho mas fuerte que el juego en sí…
Vos me preguntás cuanto es el premio de
una carrera que yo gano y no tengo la menor idea. Por supuesto que de eso vivo,
pero yo corro para sacarme la foto.
Tengo claro que en tu
caso y en el de muchos jockeys lo hacen más por un amor a la profesión más allá
de lo económico
Es mas que nada por eso, porque la verdad
que ir a 60 Km/h arriba de un animal que no sabes si va a saltar la cancha, a
partir una mano o ponértelo de sombrero. Si lo hacemos con toda la pasión del
mundo es porque verdaderamente lo llevamos adentro y corremos todos esos riesgos
cada dos minutos
El 23 de septiembre
de 2001 con la yegua Nova Era ganaste
el Selección de La Plata
Si, hacía una semana que me había
recibido de jockey y fue mi primer Grupo 1.
¿Cómo lo viviste?
La verdad que el día que gané mi primer
carrera y el día que gané ese Grupo 1 son dos fechas inolvidables. Fue todo junto,
fue todo muy rápido.
¿Cuál fue ese
sinsabor que te pegó fuerte?
Esto es así: tenés muchos momentos de
alegría y felicidad, y momentos tristes también. Es una mezcla continua. Quizá
el día que se me ha roto algún caballo que quería mucho o ese tipo de
accidentes. No accidentes que me hayan comprometido a mi, sino mas por el
animal. Esos son los días tristes.
Recorriste el Perú
participando en el torneo de Jocketas
Si, participé dos años.
Otra experiencia
inolvidable me imagino
Si, fue muy lindo. También estuve en
Fustas de América en años anteriores, que era torneo mixto.
En todos estos años alguna
anécdota seguro debes tener
El día que debuté con una yegua de Papá,
(debuté en san isidro), que fue la misma con la que gané mi primer carrera. Y
la verdad que venía bastante perdida ese día, y el primer chirlo que le quise
dar a la yegua me lo pegué yo en la cola.
¿Y le corres todavía
a papá?
Si. Él no tiene tantos caballos cuidando
ahora pero cada tanto le corro.
¿Y como se establece
esa relación entre compositor y jockey? Porque debe ser bravo siendo padre e
hija…
Es medio complicado. Relacionar la
familia con el trabajo n es fácil. Cuando se puede evitar se evita, y cuando no
tratamos de tener paciencia los dos. Aparte el apellido Carabajal es un poco
fuerte, y los dos tenemos la misma sangre.
¿Algún cuidador que
quieras resaltar en tu carrera?
Todos me dieron una mano muy grande.
La verdad que le tengo que agradecer a todos por ayudarme a estar donde estoy
ahora y a poder continuar con que amo.
¿Alguna amistad que
hayas cosechado entre los jockeys?
Si: solo amigo Vanesa, una jocketa que ya
no corre más y la amistad más grande la tengo con ella. Después tengo buena
relación con toda la gente del Turf, pero amiga solo ella.
¿Y con los hombres
como te relacionas?
Bárbaro, me llevo muy bien con todos.
Convengamos que es un
ambiente donde se respeta mucho…
Cada uno se hace el lugar y después eso
es lo que los demás respetan. Yo me siento muy respetada por mis compañeros y
lo mismo hago yo con ellos.
¿Cuál fue el mejor
caballo o yegua que hayas corrido?
La que me dio mayor satisfacción es con
la que gané mi primera carrera. Y después Nova Era, que fue con la que gané el
Grupo 1. Y después quizás algún caballo de un cuidador que le corría muchos,
que era Acuri, un caballo que corrió muchos clásicos.
¿San Isidro, Palermo o
la Plata para correr?
Los tres, mientras que haya máquina no
hay problema.
¿En la punta o
mirando el desarrollo?
Donde se sienta cómoda mi caballo me
siento cómoda yo. No hay una preferencia.
Un comentario final
Las carreras de caballo es el único deporte
donde la mujer compite de igual a igual con el hombre. No es como el boxeo,
donde una mujer boxea con otra mujer o el fútbol, que son todas mujeres.
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