Uno de los máximos ídolos en la historia de Boca, en donde ganó seis títulos. Un gran Nº 6. Además es, con 426 partidos, el jugador con más presencias de la historia del club de la rivera.
“Esto viene desde hace mucho tiempo,
lo que pasa es que ahora hay otros intereses y por ahí no hay nadie que pueda
revertir eta situación y se hace difícil. A Cantero lo noto firme pero si no
tiene quien lo acompañe yo creo que la situación se le va a complicar.”
Ya vivió estas
situaciones:
“Las viví con respeto mutuo. Cuando
yo era el capitán daba la cara y les pedía que viniera uno solo a hablar
conmigo. Teníamos la comunicación que por ahí realmente se tiene que tener, y
el respeto mutuo, que eso es muy importante. Yo creo que en ese momento me
manejé bien.”
“Normalmente cuando íbamos a jugar a Córdoba o Santa Fe yo tenía la posibilidad
de que “El Abuelo” hablara conmigo y mandara a uno de los de él para charlar
conmigo. Venía al hotel, yo hacía una reunión para pedirme para un sándwich y
un vino. Lo de los micros ya estaba acordado con los dirigentes y siempre fue
así.”
“A mi me preguntaron: “Roberto: ¿Vos dabas plata a la hinchada?”. No, yo jamás
he dado para que me griten o para que me alienten. Pero si de atenderlos en el
momento ideal. Yo subía y hablaba con mis compañeros y les comentaba que vino
fulano de parte de José a pedir plata para un sándwich y un vino. El que quiere
poner que ponga, el que no quiere poner que no ponga. Yo ponía la plata en un
sobre, lo cerraba y se lo daba. Y ahí nadie sabía quien era el que ponía y
quien era el que no ponía. Como pasó una vez que un jugador de Boca fue
botoneado y se tuvo que ir. Muy identificado con San Lorenzo, fue previo al
mundial de México.”
Su trabajo en las
divisiones inferiores de Boca:
“Actualmente me designaron para hacer
clínicas en el Interior. No es captación, son clínicas realizadas dentro de la
cancha. Son aproximadamente 100 chicos de 10 a 15 años donde se hace un trabajo
de técnica individual, técnica colectiva, golpe con parte interna y externa,
parietal derecho y parietal izquierdo, definición, remate. Son tres ejercicios
que los chicos van realizando, son aproximadamente treinta chicos por grupo que
van pasando por cada trabajo. Esto se hace por intermedio de la peñas de Boca,
algo que hice hace cinco años.”
El Boca de Lorenzo
“El Boca del 81 se caracterizaba por
su juego individual. En cambio la estructura del Boca de Lorenzo era distinta.
Cada uno sabía lo que tenía que hacer dentro de la cancha. Y no se casaba con
nadie: afuera y listo. No había figuritas para él. Cuando perdimos en el 79 la
Copa Libertadores contra Olimpia, no lo podíamos creer porque estábamos acostumbrados
a ganar, y esa fue la mejor copa que hicimos. Terminamos segundos y nadie se
acuerda de esa copa.”
Desmiente su
desembarco en El Porvenir como parte del cuerpo técnico de Luis Ventura
“Me parece que no es ético estar en
otro club, estar en mi casa e ir a una casa ajena. Me parce que no es una cosa
lógica. Yo hubiese sido el primero en ir a Boca, reunirme y contar sobre esa
posibilidad.”
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